Influenciados por los sonidos de la “NWOBHM” y el hardcore punk junto a riffs y solos de velocidades desenfrenadas y voces iracundas escupiendo poemas sobre denuncia social y política, a comienzos de los ochenta un puñado de bandas sacudían los recintos del circuito under de Estados Unidos. Más tarde bautizaríamos a esta amalgama de características bajo el nombre de Thrash Metal con bandas como Slayer, Metallica, Exodus u Overkill como pioneras del estilo. Del otro lado del charco, sobre todo en la dividida Alemania, el movimiento era abanderado por bandas como Kreator, Sodom o Destruction quienes coqueteaban un poco más con un black/death metal primitivo. Pero cruzando la frontera septentrional, en un suburbio de la capital danesa, los hermanos Morten y Michael Stüzer lograban fusionar una brutalidad abrasiva con tecnicismos y potentes melodías que serían imposibles de pasar por alto. Este proyecto fue denominado Artillery, y, aunque menos recordados que las bandas anteriormente nombradas, han contribuido al desarrollo del subgénero siendo uno de los exponentes más antiguos del Thrash europeo. Te presentamos cinco municiones de grueso calibre infaltables para tu arsenal personal.
1. The Almighty
Debido a que las cintas demo de Artillery fueron bien distribuidas, la banda ganó reconocimiento mundial incluso antes del lanzamiento de su primer álbum oficial. Numerosos cantantes desfilaron por la alineación escandinava hasta que finalmente dieron con el cañón vocal de Flemming Rönsdorf aportándole una energía singular y una imprenta distintiva al thrash/speed practicado hasta el momento. “Fear of Tomorrow” (1985), el crudo debut de los daneses, fue recibido con críticas entusiastas y es considerado un clásico del Thrash europeo. “The Almighty” es probablemente la canción más recordada de aquel lejano debut y una favorita de los fans en concierto. La letra toca un tema bastante recurrente en este estilo de música, cuestionando la fe de las religiones abrahámicas y las numerosas contradicciones de sus libros sagrados.
2. Terror Squad
En septiembre de 1986 Artillery volvería a entrar en el estudio para grabar su segunda placa. Por razones inexplicables, el sello Neat Records atrasó la salida del mismo casi un año haciendo que algunos de sus miembros se desmotivaran y abandonaran la agrupación. De todas formas “Terror Squad” (1987) presentó un claro paso adelante tanto en la calidad de las composiciones como en la producción, con un Flemming Rönsdorf descollante quien explotó al máximo el espectro de su caudal vocal. La gira promocional de la placa los llevó a ser una de las primeras bandas de rock extranjeras en tocar en la Unión Soviética en cinco presentaciones con entradas agotadas. Hasta este día, no hay show de Artillery en donde no sea ejecutada la canción título.
3. Khomaniac
No es casualidad que “By Inheritance” (1990) sea considerado la cumbre compositiva de la carrera de Artillery. El salto de calidad en parte fue proporcionado gracias a la incorporación de Flemming Rasmussen como productor, quien fuera ingeniero de sonido de 3 piezas clave en la discografía de los ya consagradísimos Metallica. El Thrash desenfrenado dio lugar a potentes melodías con estribillos adictivos a primera escucha: entre ellas está la potente “Khomaniac” que ya había sido lanzada previamente en un demo de dos canciones. La letra de la canción es una carta abierta contra Ayatollah Khomeini, líder político-espiritual de la Revolución Islámica de Irán entre 1978 y 1979, que terminó con la monarquía del sah Mohammad Reza Pahleví, acusándolo de “occidentalizar” la nación persa.
4. 10.000 Devils
En 1991 la agrupación se disolvió y volvió en 1997 para lanzar un intrascendente nuevo álbum titulado “B.A.C.K.” (1998), volviendo a separarse un año más tarde. No fue hasta 2007 que decidieron volver a disparar los cañones lanzando un disco en vivo y DVD para presentar a su nuevo vocalista Søren Adamsen, quien a diferencia de Rönsdorf, tenía un espectro vocal más melódico que agresivo, haciendo que las composiciones de los daneses viraran hacia un costado más emparentado con el Heavy Metal que con el Thrash de la vieja escuela. “When Death Comes” (2009) fue el primer esfuerzo de esta nueva era que probaría ser más fructífera de lo pensado y “10.000 Devils” se ha ganado un lugar indiscutido a la hora de armar el repertorio a presentar. La letra habla sobre lo que siente una persona con depresión.
5. Live by the Scythe
Adamsen abandonaría la agrupación en 2013 luego del lanzamiento de “My Blood” (2011). Para sorpresa de todos el reemplazante sería Michael Bastholm Dahl: ¡Un cantante de Power Metal! Evidentemente, la banda tuvo que adaptar su sonido al caudal vocal del nuevo miembro volviendo las composiciones aún más melódicas y gancheras, y dividiendo aun más las aguas entre los fanáticos. Sin embargo “Legions” (2013) recibiría buenas críticas y “Penalty By Perception” (2016) lo haría aun más. La melódica y potente “Live by the Scythe” resulta un buen resumen de esta nueva era en la carrera de Artillery, dejando de relieve que todavía queda munición para rato. La letra habla sobre el karma, de que jugando a ser la muerte a veces ésta lo encuentra a uno primero.
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