Crónica: Nahuel Escalada / Fotos: Pantera Von Ortner

La movida del Folk Metal, así como la del Black y el Death, es escasa en nuestro país, si nos referimos a concurrencia. Como suele suceder, es un estilo para unos pocos; para los declarados fanáticos o aquellos interesados en este folklore. Es por eso que con cada visita de alguna banda “grande” que resuena en dicha escena, es motivo suficiente para estar presente.

En esta oportunidad, fue la segunda llegada de los fineses Finntroll a nuestro país y la presentación de su más reciente LP titulado “Blodsvept”, a pesar de sus ya tres años dentro del mercado. Con cita en el recinto The Roxy Live, el pasado martes 18 de octubre, la jornada comenzó minutos pasadas las 18 hs cuando la gente de Vynkord tomo el escenario. Tras un correcto y pequeño setlist, dos cosas daríamos por sentado esa noche: el sonido prometía ser el mejor y veríamos un desfile de vestimentas, bien al estilo honorado, en cada acto de la noche. Los segundos en pisar el escenario fueron Zrymgöll, quienes tristemente nos comunicaron que este sería su último show por un tiempo indeterminado. Acordeones, flautas, violines y el más furioso sonido distorsionado de guitarras gemelas, los Zrymgoll se mostraron –a mi criterio- como lo más interesante de la noche y, en parte, gracias a su carismático frontman (Juan Pablo “Juskko” Churrurian) ejecutando su acordeón. El tercer acto vino de la mano de Cermunnos y sus polleras escocesas, quienes en casi 40 min, lograron destacarse gracias a su vocalista Martin Noe con sus agudos, graves y falsetes.

Sin más preámbulo, y a las 21hs puntual, los integrantes de Finntroll se hicieron con las tablas de The Roxy y en casi dos horas, nos brindaron un show espectacular. Luego del comienzo con “Blodsvept” y “Vindfard”, poco a poco el sonido se fue acomodando para escuchar con claridad los instrumentos presentes, sin dejar de lado las condiciones vocales de Mathias Llilmans que, honestamente, se posiciono como la figura de la noche. Los temas tomaron su curso y la seguidilla de “Mordminnen”, “Eliytres” y “Fiskarens Fiende” fue suficiente para que la audiencia transpire la camiseta entre pogos, coreos y rondas paganas. Bajo un inglés entrelazado con acento finlandés, Llilmans agradeció cada vez que pudo al público argentino por su cálido recibimiento, como el violero Routa (Mikael Karlbom), que con sus muecas ansiosas se tomó el atrevimiento de aprenderse la frase “rompan todo” para presentar uno de los favorito de la audiencia. Por supuesto, la respuesta fue inmediata y “Slaget vid Blodsalv” fue lo mejor de la noche. Los temas siguieron pasando (“Solsagan”, “Nattfodd”, “Haxbrygd”) y luego de un pequeño receso, los Finntroll regresaron al escenario para finalizar el show con los clásicos “Jaktens Tid”, “Trollhammer y “Under Bergets Rot”. Saludos, agradecimientos y exhaustos luego de casi dos horas de concierto, los Finntroll se despidieron de Buenos Aires con la promesa de un retorno. Y espero que así sea porque hay un público que los va a estar esperando.
 
 
 
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