La recomendación que les acercamos hoy, es una verdadera joya de colección, sin exagerar. Con una edición bellísima en tapa dura y 343 páginas de puro conocimiento, La historia del Heavy Metal, de Andrew O’Neill (humorista y músico inglés) es un libro que todo metalero debería tener.

Editado este año por Blackie Books y traído a la Argentina por Del Nuevo Extremo, este libro le hace honor (literalmente) a su título. Es un libro de historia, con todas las letras. Un libro con el cual se aprende y se piensa.

O’Neill nos relata con humor y picardía (pero sin perder la seriedad y el hilo de lo que es una investigación en historia) porqué el heavy metal es lo que es, de dónde surgió y cómo fue su evolución a lo largo del tiempo; pero, más allá de todo eso, nos ubica en espacio y en tiempo. Podemos trazar constantemente líneas temporales mentales con tanta claridad que comenzamos a ver cada vez más lógicamente porqué el metal llegó donde llegó. Si recuerdan algún libro de historia que hayan leído en la escuela, se podrán imaginar cómo está estructurado y por dónde viene la mano: para conocer el hoy, hay que estudiar el ayer y el anteayer.

Por lo anterior, O’Neill comienza analizando las raíces del blues (por supuesto) hasta que llega a enumerar todos los grupos del proto heavy, con Black Sabbath como la semilla del movimiento (el autor se detiene muchas veces para aclarar que el término “heavy metal” se utilizaba livianamente en los setenta para encasillar a grupos que, en realidad, no lo eran). Luego se extiende varias páginas en el primer grupo real de heavy metal, quien redefinió el término y dejó a Black Sabbath ubicado en el límite, en el buen sentido: Judas Priest. De ahí en adelante, nos topamos con un compendio analítico de cada etapa que le siguió y de los subgéneros que fueron apareciendo en la escena: la NWOBTM (New Wave of British Heavy Metal), black, thrash, glam, death, segunda ola del black, el grunge y el groove de los noventa, el nu—metal, el metcalcore, el movimiento revival que se está dando hoy —no lo menciona explícitamente, pero cabe preguntarse: ¿qué hace que surja con tanta fuerza la NWOTHM (New Wave of Traditional Heavy Metal) con bandas nuevas que suenan igual que Judas o Manowar?—, y cierra con un final abierto en el cual se pregunta ¿qué le depara el futuro al heavy metal?

Y, si como el final futurológico que nos da O’Neill cual oráculo melómano haciendo predicciones anuales fuera poco (en serio, el tipo hace una predicción muy divertida, pero con una lógica que mete miedo, hasta el año 2130 dando un salto fenomenal hacia el 5078), el autor nos regala un utilísimo índice onomástico para consultar con rapidez y facilidad cualquier duda que nos pueda surgir sobre algún dato de cualquier músico o hecho dentro de la escena metalera.

Este libro de historia musical trata los orígenes de cada género y subgénero como la combinación de la evolución musical propiamente dicha (instrumentos musicales, nuevo sonidos y arreglos, etc.) y el momento político y social a nivel mundial. Vamos a conocer los hitos principales de cada momento de la historia del heavy y los datos que sí o sí hay que conocer como buenos metaleros que somos. De hecho, muchos hitos ya los conocíamos, pero no sabíamos bien porqué los hechos se habían dado de esa manera. Para eso es un libro de historia: para conocer los hechos y las razones; y para preguntarse qué hubiera pasado si.

Además de todo, cada página está plagada de humor de buena calidad, ataques “cariñosos” a ciertas bandas y referencias a películas y personajes de la cultura pop. Con lo cual, es la combinación perfecta entre conocimiento, humor y una invitación a pensar. Si creían que leer un libro de historia era aburrido, los invitamos a que lean La historia del Heavy Metal. Después nos cuentan.