En 1990, la banda liderada por Walter Giardino lograría componer una de las placas fundamentales del heavy metal nacional. Sumando a Adrián Barilari a sus filas, Rata Blanca alcanzaría el éxito masivo con su obra cumbre: “Magos, Espadas y Rosas”.

Cuenta la historia que hacia finales de los años 80, Rata Blanca, banda formada por el guitarrista Walter Giardino en 1985, necesitaba un nuevo cantante, tras la salida de Saúl Blanch, quien fuera la voz del grupo en el disco debut, el auto titulado “Rata Blanca”. Para ocupar ese puesto el elegido fue Adrián Barilari, cantante proveniente de la banda Días de Gloria, quien a partir de su potente registro permitiría al grupo expandir y enriquecer su propuesta musical.

“La Leyenda del Hada y el Mago”, track inicial de la placa, sacude de inmediato los cimientos y despeja dudas: Rata Blanca apuesta una carta ganadora de entrada. Un riff oscuro, pesado y enérgico le deja lugar a Barilari para que mediante altísimos tonos vocales narre una clásica historia de fantasía medieval. El imaginario medieval europeo en la lírica, con castillos, espadas y magia, se convertiría en uno de los sellos distintivos del aporte de Rata Blanca a la escena nacional, junto con otro aún más significativo: la riqueza técnica en la composición instrumental. Y prueba de ello se encuentra en el excelso solo a cargo de Giardino, precursor también en la concepción del guitar hero local. Los casi 2 minutos que abarca el solo de guitarra son una sublime demostración de recursos técnicos, donde los barridos le abren paso al tapping y viceversa, como lo hacen a su vez las notas ligadas y los palancazos, todo siempre perfectamente armonizado por un gran sentido melódico. Finalizando el tema, nuevamente Barilari despliega su elevado registro para luego cerrar, como no podía ser de otra manera, con otro notable solo de guitarra.

El segundo tema del disco, “Mujer Amante”, cumple esa premisa no escrita, pero casi siempre concretada, acerca de la necesidad de incluir una balada en todo álbum de heavy metal. En este caso, el tema no solo cumple si no que se destaca por su propio peso. Una melodía muy bien lograda, armonizada a la perfección por la voz de Barilari (también letrista de la canción), complementa un excelente ejemplo de aquello que se ha dado en llamar power ballad. Giardino aporta un par de brillantes solos de guitarra, exponiendo no solo la notoria influencia del metal neoclásico si no también la del hard rock de los 70’s y 80’s, redondeando una canción con destino de éxito, a pesar de que en un principio no iba a ser incluida en el disco y, como en tantos otros casos, terminó convirtiéndose en clásico. “El Beso de la Bruja” arremete con velocidad a partir del trepidante ritmo impuesto desde la batería del ex V8 y co-fundador de Rata Blanca, Gustavo Rowek, dando paso a un potente tema que nuevamente permite el despliegue del virtuosismo del guitarrista líder en el solo.

Continuando con energía, “Haz tu jugada” sirve también de presentación para la otra incorporación de la banda, el tecladista Hugo Bistolfi. Contar con teclados le permitió a Rata Blanca conseguir el sonido épico en el que transcurren las historias narradas por Barilari, y allí, Bistolfi demuestra una perfecta complementación con los climas y pasajes de cada tema, como por ejemplo los que encontramos en esta canción, donde, además, se luce con un solo a contrapunto con Giardino. “El Camino del Sol”, el tema más largo del disco, comienza dándole protagonismo nuevamente a las teclas, para luego adentrarse en un medio tiempo sigiloso y progresivo, con tintes magnificentes y opulentos, con una letra tan épica como su música.

“Días Duros” es una apuesta por el hard rock Deep Purpleano, notoria influencia musical de la banda, donde el descomunal registro vocal de Adrián Barilari se desenvuelve con soberbia naturalidad. Claro que quien también se destaca nuevamente es Walter Giardino, con un solo a la altura de sus capacidades técnicas, siempre bien respaldado por la sólida base conformada por el bajista Guillermo Sánchez y el guitarrista rítmico Sergio Berdichevsky. El cierre del disco llega con “Por qué es tan difícil amar”, tema instrumental que permite, una vez más, apreciar las enormes condiciones de Giardino para tocar la guitarra. “Magos, Espadas y Rosas” se cierra a pura melodía de alto nivel, confirmando que se trata de una de las obras más sobresalientes no sólo del heavy metal nacional, sino de toda la música pesada de habla hispana.

El legado de “Magos, Espadas y Rosas” de Rata Blanca:

El disco significó un suceso absoluto para la banda, convirtiéndose en poco tiempo en disco de oro y, en menos de dos años, en Doble Disco de Platino, la certificación más alta de ventas a nivel nacional. “Magos, Espadas y Rosas” es el álbum más vendido de la historia del heavy metal argentino.

A menudo considerado uno de los álbumes más influyentes del heavy metal en idioma español, el disco otorgó los máximos éxitos de Rata Blanca: “La Leyenda del Hada y el Mago” y “Mujer Amante”, que se convirtieron en clásicos absolutos de la banda y del rock argentino.

Adrián Barilari saltó a la escena con un debut triunfal, consolidando de esta manera la dupla principal de la banda, junto al virtuosismo de Walter Giardino. Más allá de la ausencia del cantante durante casi una década, a partir de “Magos, Espadas y Rosas” su voz es referencia de la discografía de Rata Blanca y de toda la escena local.