Cinco años después de crear uno de los discos de metal más vendidos e influyentes de todos los tiempos, Metallica vuelve a confiar en el productor Bob Rock para producir “Load”. El trabajo marco un punto de inflexión en la historia del cuarteto, significando un cambio rotundo tanto de imagen como de sonido.

Lars Ulrich y Kirk Hammett dieron forma a la transición, empujando los límites del conjunto hacia nuevos horizontes, lo que generó una enorme controversia dividiendo a los fans y la prensa en torno a su metamorfosis.

Al igual que su padre, Lars es un gran aficionado al arte y la pintura, y atesora una fabulosa colección de cuadros, entre los que se encontraba “Profit I” de Basquiat, vendido por una cifra millonaria que marcó un récord para el autor. Lars lideró la decisión de abandonar al artista de skate-punk Brian “Pushead” Schroeder, creador de gran parte de los diseños e imágenes más representativas de la banda.

“Load” presentó el nuevo logo de Metallica sobre una fotografía de Andres Serrano, quien había ganado notoriedad por su controvertida obra de 1987 “Piss Christ”. Serrano logró impresionar al guitarrista Kirk Hammett con su trabajo para la canción “Crush My Soul” de Godflesh. El video, que era su debut como director, mostraba a la banda tocando junto con escenas de peleas de gallos y blasfemias de tipo religioso.

La pieza utilizada para el sexto álbum de Metallica se titula “Blood and Semen III” y esta compuesta por una mezcla de sangre bovina y semen, prensado entre dos laminas de plexiglás. Técnica que repitió dos años más tarde para “ReLoad”, esta vez intercambiando esperma por orina, involucrando los propios fluidos corporales del artista.

Además de la inclusión de esta obra de arte contemporáneo en su portada, el primer single del disco: “Until It Sleeps”, cuyo video fue dirigido por Samuel Bayer (autor también de videos icónicos de los 90 como Smells Like Teen Spirit de Nirvana y No Rain de Blind Melon), fue inspirado en el popular cuadro “El Jardín de las Delicias” de El Bosco.