Cuando todos nos preguntábamos que era de la vida de Alice Cooper luego del lanzamiento de “Welcome 2 my nightmare”, reunión de por medio con el mismísimo Bob Ezrin, aparece con “Super Duper Alice Cooper”, su propio documental, pero esta vez captado absolutamente todo por Sam Dunn, Reginald Harkema y Scot McFadye. Tres jóvenes cineastas metaleros canadienses, directores, productores y guionistas que supieron adaptar de forma ideal la lucha de personalidades por las que atravesó Vincent Damon Furnier a lo largo de su vida.

A todo esto le tenemos que sumar la cantidad y calidad de imágenes de archivo poco comunes que se utilizaron, los testimonios de los mismos protagonistas qué lo acompañaron en sus etapas, las historias que nos cuentan sobre los comienzos de Alice Cooper como banda nueva de rock, la opinión negativa de la gente en la escena de Los Ángeles, y luego su aceptación en la vuelta a Detroit, su ciudad de origen.

El documental de Alice Cooper proporciona 98 minutos de puro rock, historias reales, algo de terror y suspenso con comedia, cómo nos tiene acostumbrado este señor. Altamente recomendable.