Crónica: Nahuel Escalada / Fotos: Cristian Estaurino

Max e Iggor Cavalera, fundadores históricos de Sepultura, celebraron en el Teatro Vorterix el vigésimo aniversario del lanzamiento de “Roots”, sexto trabajo de estudio de la banda y el último en el que participó Max.

En medio de un calor infernal, las puertas del Teatro Vorterix abrieron una hora más tarde de lo impreso en el ticket y ya dentro del recinto, Incite -la banda liderada por Ritchie Cavalera, uno de los hijos de Max-, agitaba con su propuesta, mezcla de thrash groove y hardcore. A pesar de ser su debut en Argentina, los muchachos de Arizona y en especial su carismático vocalista, dejaron una gran impresión. El teatro pronto comenzó a llenarse y para cuando el telón del Vorterix se abrió, Max rompió el silencio al son de “Roots Bloody Roots”, poniendo a saltar a todo público. El amor a Sepultura sigue intacto, cualquier cosa referida a la banda por parte de los hermanos, será recibida con los brazos abiertos y eso se demostró durante todo el setlist. Llegaría el momento de “Attitude” con Max jugueteando con el Berimbau –el instrumento brasilero de una sola cuerda- y, rápidamente, “Cut-Thoat” desatando el pogo. La banda que los acompaña, es la misma de Cavalera Conspiracy y, a pesar de cumplir con efectividad sus respectivos puestos, quedaron en un plano totalmente secundario. “Ratamahatta” siguió en la lista y se postuló como uno de los más festejados de la noche, así como “Breed Apart” y “Straighate”.

El que haya tenido la oportunidad de ver a Max en visitas pasadas, sabe que su guitarra la tiene prácticamente de adorno y que solo se limita a cantar. Esta vez tuvo un poco más de interacción con su instrumento, sobre todo en los momentos en que quedaba solo con su hermano. Y si hablamos de Iggor, su set de batería sonó con total precisión y la ejecución de las composiciones, fue tal cual el registro grabado hace ya veinte años. En “Born Stubborn”, Max hizo referencia a la oración que dice “Sepultura en mi corazón / estas raíces siempre van a permanecer”, y en “Itsari”, se originó una especie de jam entre los hermanos en las percusiones. Fue así que “Roots” fue reproducido en su totalidad, pero faltaban los bises, la banda volvió para entonar el clásico “War Pigs” de Black Sabbath y, quizás la sorpresa de la noche, el magnífico “Procreation (of the Wicked)” de Celtic Frost, ese cover que es parte de la edición deluxe de “Roots”. Aún faltarían más emociones y un medley del clásico Sepultura fue ejecutado -“Desperate Cyr/Inner Self/Policia/Orgasmatron”-, solo por los hermanos, como pie perfecto para despedirse con “Ace of Spades” –en honor al legendario Lemmy- y una versión furiosa y acelerada de “Roots Bloody Roots”, dando cierre a la noche y el puntapié inicial para que revisiten viejo material en el futuro.

 
 
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